Saber
qué es lo que queremos alcanzar en la búsqueda de empleo, es un paso positivo
hacia la solución y aumenta la probabilidad de tomar decisiones eficaces.
Una
forma muy eficaz de colaborar con el demandante de empleo, es ayudarle a
visualizar y precisar sus metas y objetivos. Para ello se pone
a la persona en la situación que imagine un futuro exitoso, invitándole
a pensar cómo serían las cosas si en el futuro consiguiera sus objetivos, para
que después, retrocediendo, nos describa: con sus propias palabras los pasos
que daría para llegar a esa situación. Después podemos continuar indagando
sobre cómo consiguió su entrevista o como se preparó para ella, a quien se lo
contó etc…Otra forma de conversación muy útil para conseguir objetivos es
plantear al demandante que nos describa su situación en forma de escala
valorativa.
Si queremos que los objetivos de búsqueda de
empleo cumplan un papel activador del sistema de motivación, deben cumplir, al
menos, tres requisitos: Ser propios, estar formulados en positivo y ser
concretos.
- Ser Propios: Una persona en situación de desempleo, tiene que programarse la búsqueda por sí misma, lo que no quiere decir que lo tenga que hacer solo o sin ayuda pero que si debe nacer de su interior y no ser copiado de otro. Si queremos aumentar las probabilidades de que realice actividades de búsqueda eficaces y de que se mantengan en el tiempo, tenemos que asegurarnos de que es el propio desempleado el que decide y asume que actuaciones son esas y cómo desarrollarlas.
- Formulados
en positivo: Un objetivo motivador debe formularse como algo a hacer o a
conseguir, no como el abandono de una actividad. Pensar en que “no tengo
que ponerme nervioso” o “debo dejar de usar esa muletilla en las
entrevistas” solo nos distrae de hacer otras cosas bien y nos produce una
sensación de inseguridad y tensión.
- Ser
Concretos: Las metas demasiados generales o ligados a sentimientos
indefinidos a menudo producen pensamientos de incapacidad o dificultad en
las personas. Pensar que “me mostrare muy seguro de mí mismo” por ejemplo,
es difícil que nos motive a hacer algo si no tenemos muy claro qué es eso
de mostrase seguro, en que se nota y que puedo hacer para ofrecer esa
imagen. Concretar significa descomponer una meta en conductas más pequeñas,
describir pasos intermedios observables, cosas alcanzables.
La
persona que busca trabajo debe planificarse de manera autónoma. Conseguir metas
concretas, verificables y medibles, ello ayudará a que la persona se autoevalúe
y pueda adaptarse mejor al mercado laboral en el que busca empleo.
LA PSICOECONOMÍA ES UN SENTIMIENTO, VOLVERÉ!!
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